jueves, 28 de junio de 2012

AMOR ITER

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..cuando despierto estamos otra vez rodando por la carretera. Noto que se me está cayendo un poco la baba en mi estado de inconsciencia y me incorporo de repente limpiándome la barbilla con el dorso de la mano. A mi lado ComisarioPotente conduce con gesto adusto pero al verme despertar, compone por un segundo una leve expresión de culpabilidad y dice
"lo siento. Pero no puede usted ir besando a todos los hombres que se le cruzan por delante porque puede ocurrir que haya quien no simpatice con sus tendencias. ¿Lo entiende?"
Al llevarme la mano a la boca siento un relámpago de dolor y recuerdo el puñetazo en el area de descanso, cosa que me hace cruzar los brazos y fruncir el ceño mirando a la carretera.
"Vamos, no sea niño" insiste"Quizás no aclaramos este punto cuando hubo que hacerlo y este sea un buen momento para ello: estoy aquí porque creo en su inocencia, no porque esté enamorado de usted."
Por alguna razón, eso me hace sentir más humillado de lo que ya me siento.
Mi expresión hace resoplar a ComisarioPotente.
"Venga, caray. Tenemos que trabajar en equipo, no va a estar con esa cara durante todo el tiempo, ¿verdad?..." me contempla de reojo un segundo para no perder de vista la carretera y sigue "...¿no cree que es mejor que le diga este tipo de cosas claramente ahora para no hacerle creer historias que no son ciertas?"
Intento decirle que no se lo tenga tan creído y que no me gusta tanto como él puede creer, pero a través de su camisa desabrochada veo un poco del vello de su pecho y la sombra de su tetilla más oscura a lo lejos, y prefiero no decir nada antes que mentir.
"No debí haberle golpeado, le pido perdón por ello, nada más debería haberle dicho lo mismo que le estoy diciendo ahora, pero me sentí repentinamente...invadido, y reaccioné de esa manera instintiva. Lo siento, y siento que quizás algo en mi actitud le haya podido hacer pensar en otra cosa distinta, ¿vale?"
Lanzo un bufido y digo
"Es cierto, no debería haberme golpeado. Pero está bien aclarar las cosas para no dar pie a más confusiones. Entonces le gustan las mujeres, ¿no?"
"Ajá" dice en tono un poco ausente como si ya hubiese dicho lo que tenía que decir, y me vuelve a irritar su ausencia, de manera que cierro los ojos y finjo que vuelvo a dormir hasta la siguiente parada.

...de hecho, me quedo de nuevo dormido en virtud de la bendita facilidad que he tenido siempre para quedarme inconsciente cuando estoy a bordo de los medios de transporte, y al abrir los ojos Comisario me está zarandeando. Es de día, parece temprano pero ya hace un calor de la hostia y estamos en el aparcamiento de un restaurante de carretera, rodeados de camiones y otros vehículos.
"No sé usted, pero yo necesito comer algo y hacer pis." luego pone gesto de embarazo y pregunta "¿qué tal está usted de dinero en efectivo? Dentro de poco habrá que poner gasolina y no deberíamos usar las tarjetas de crédito, ya me entiende."
Me bajo del coche con todas las articulaciones doloridas y el cuerpo suplicando por una ducha.
"no lo entiendo. Entonces cual es el plan, ¿correr en dirección contraria a la policía hasta quedarnos sin fondos?" empieza a fruncir el ceño y le atajo con un gesto "vale, vale, ya sé que es todo puro altruismo y que lo hace por mi inocencia. Vamos a comer algo. Yo invito, tranquilo."
El sitio está abarrotado y tenemos que hacer un rato de cola para que una mujer sudorosa y malhumorada nos tome nota del pedido y nos indique una mesa donde sentarnos. Solo entonces ComisarioPotente da un par de cómicos saltitos a mi lado y murmura:
"ahora voy a hacer pis, ¿vale? no se escape."
Me dejo caer en la silla con un resoplido tratando de pensar qué vamos a hacer a continuación y qué rumbo nos conviene que tomen las cosas, cuando en la mesa de enfrente veo a un tipo que me sonríe de refilón. Tiene aspecto de camionero, le calculo unos cincuenta años, y aunque tiene una barriga más que incipiente y los vaqueros y la camiseta que gasta están muy sucios, le encuentro un cierto atractivo salvaje. Se rasca la barba rubia, me vuelve a sonreir utilizando apenas nada más que los ojos azules y hace un ligero gesto hacia su entrepierna, visible desde mi posición.
El tipo está más que empalmado y con disimulo coloca los dedos sobre la tela alrededor de su erección para que yo pueda apreciar el tamaño del asunto.
Llevo tiempo sin follar y mi listón está por los suelos, así que asiento sonriendo a mi vez y él se levanta y se va a los servicios. Por el camino se cruza con ComisarioPotente que parece aliviado al verme allí sentado con cara de monjita. Le sorprende verme levantarme como un resorte y tengo que cacarear
"¡qué pasa, yo también tengo que atender mis necesidades fisiológicas!" lo cual es en cierto modo pero no de la manera que él se imagina, y salgo corriendo tras CamioneroMorboso.

...los lavabos están igual de transitados que el mismo restaurante por ese síndrome del viajero de dejar la vejiga vacía antes de enfrentar otro par de cientos de kilómetros. Veo a CamioneroMorboso demorarse un poco en la puerta de uno de los retretes para que me de tiempo a verle donde entra antes de encerrarse allí. Yo no me ando con excesivas precauciones porque tengo el rabo a reventar, me contemplo un momento en el espejo comprobando que mi aspecto es casi tan sucio y sudoroso como el de mi próximo partenaire y luego entro en el habitáculo, echando el cerrojo tras de mi.
A CamioneroMorboso y a mi ahí dentro apenas nos separan unos centímetros, el sonríe, sin prolegómenos me agarra la polla a través de los pantalones y su sonrisa se aumenta al comprobar que yo estoy ya listo para la acción.
Se echa sobre mi apretándome contra la puerta, huele a sudor y a gasolina pero aún así después de unos largos instantes restregándome la barba por el cuello y las mejillas abro la boca y permito que me introduzca una lengua gruesa que sabe a tabaco. Luego me agacho, le bajo la cremallera de los vaqueros y saco al aire una polla no muy larga pero muy gorda. Él me agarra del pelo y me la mete hasta la garganta haciéndome toser pero no cedo ni un milímetro, trago, chupo y succiono casi con desesperación mientras él se mete un puño entre los dientes para no gritar. Al fin me hace darme la vuelta y ahora es él quien se agacha para meterme la misma lengua gruesa entre las nalgas, buscando lubricar el lugar de un modo rápido y efectivo. Yo me separo los mofletes del culo para mejorar su avance y tengo que hacer auténticos esfuerzos para no montar un escándalo, entonces él se pone de pie, coloca la punta de su polla en mi puerta trasera y empieza a empujar sin ningún miramiento.
El gemido largo y ahogado que lanzo deberá hacer creer a la gente de ahí fuera que sufro un doloroso ataque de estreñimiento, pero CamioneroMorboso es un tipo pertinaz y continúa apretando hasta que tengo dentro todo aquel cacharro. Luego me agarra por los hombros para tener un punto de anclaje y comienza a follarme a ritmo ferrocarrilero, dispuesto a correrse a la mayor brevedad posible. Yo por mi parte empiezo a meneármela siguiéndole el paso y de pronto, cuando empiezo a estremecerme con las convulsiones pre-orgásmicas, me la saca del culo, me vuelve a dar la vuelta y empieza a chupármela él a mi mientras se masturba a toda velocidad, haciendo que en unos cuantos segundos yo me corra en su boca y él dispare un chorro de esperma que impacta contra los bajos de mis pantalones.
Tardamos un rato en recuperar un ritmo de respiración normal para que yo pueda decirle:
"bueno después de este polvazo, por lo menos déjame que te invite a desayunar."
"ese tu novio?" pregunta Camionero con un marcado acento extranjero que debí haber supuesto con tantos pelos rubios por todas partes.
"no, tranquilo. Solo un amigo" le tranquilizo y salimos del retrete medio abrazados ante algunas caras de indignación, sobre todo las de los que estaban esperando a que lo desalojásemos.

Cuando llegamos a la mesa Comisario está dando buena cuenta de unos huevos con bacon, y se le atraviesa un poco algo en la garganta cuando me ve llegar con la mano en la cintura de CamioneroMorboso.
"Es un amigo que he conocido en los servicios. Va a acompañarnos mientras desayunamos, ¿le parece bien?"
"No..."dice como si estuviese asimilando los conceptos"...claro que no,¿porqué iba a importarme?"
CamioneroMorboso rie virilmente y hace un gesto a la camarera indicando que va a sentarse con nosotros, luego los tres pasamos un rato masticando sin decir palabra: mi nuevo amigo concentrado en no dejar ni rastro de comida en su plato, ComisarioPotente un poco distraido ahora jugueteando con su comida y yo pensando si no será un buen momento para valorar nuevas posibilidades.
Por fin le pongo una mano en la rodilla a Camionero y pregunto
"¿tu hacia donde vas?"
No sin algún esfuerzo logramos entender que va en nuestra misma dirección y que si tenemos problemas monetarios, no le importará dejarnos en nuestro destino si lo vemos oportuno.
"que buen viaje con tu culito para mi" dice a su vez acariciándome el muslo y haciendo que ComisarioPotente ponga la mirada en el infinito.
Mientras salimos de allí y CamioneroMorboso se nos adelanta divertido por la perspectiva, me retiene un poco con el brazo susurrando
"entonces ¿entiendo que vamos a intercambiar sus favores sexuales por un medio de transporte?"
"bueno, tecnicamente podría decirse que sí" digo refunfuñando "¿qué le pasa con eso?"
"pues pasa que no deja de ser a fin de cuentas una forma de prostitución, ¿no se da cuenta? ¡y con mi connivencia!"
"si va a sentirse mejor piense que aunque fuésemos nosotros los que le llevásemos a él en el 600 a donde quiera que fuese, me lo iba a follar igual porque me encanta. El tema de llevarnos no tiene nada que ver con el sexo porque si no, tendríamos que pensar que también tendría que poner el culo usted, ¿no lo entiende?"
Dilata las pupilas en un gesto que no puedo interpretar, luego se para mirando al suelo y rascándose la coronilla y dice
"Bueno, pues tengo que contactar con la anciana que nos prestó el 600 para decirle donde está...y eso en el caso de que después de pasar una noche aquí no amanezca desvencijado por los forajidos o simplemente, desaparezca. ¿No ve que le di mi palabra a esa mujer y que se fió de mi porque yo era un representante de la autoridad?
Tengo que suspirar, previamente cansado ya de una situación que  no me interesa en absoluto.
"Bien, vamos a hacer una cosa para tranquilizar su puta conciencia. La llamamos por teléfono, explicamos lo que vamos a hacer y si contamos con su visto bueno, nos vamos con mi amigo, pero si no es así, tratamos de seguir ruta en esa....carraca sin dinero ni carburante. Venga. Hagámoslo"
Lo piensa un momento y decide
"...es lo más correcto, sí...¿tiene monedas sueltas?..."

Vaciamos nuestros mutuos monederos de calderilla frente a una cabina de teléfonos, todo por no ser identificados ni rastreados, y por fin ComisarioPotente logra contactar con su canosa benefactora.
Este es el extracto aproximado de la conversación:
"...siii?....siii?...¡hola, soy yo, el Comisario del otro día!...¿me recuerda?...siiiii?...nonono, espere,  no puede ir a por el aparato de....oiga" me mira con inquietud "ha ido a por su aparato de audición, creo que la hemos sorprendido en un mal momento....¿oiga?....¿oiga?....pero donde cojones es..."me mira de reojo con cara de culpabilidad y dice sonriendo encantadoramente "¡no contesta!" el teléfono hace un ruido siniestro al ingerir una gran cantidad de monedas y de pronto parece que Ancianita por fin se ha puesto al aparato con el sonetone puesto, entonces ComisarioPotente suelta de corrido"hemos-dejado-su-coche-en-restaurante-de-autovia-garantizo-mi-responsabilidad-de-gastos" y cuelga de sopetón. Luego me sonríe y dice:
"Ahora vamos a por nuestras cosas"después me echa un vistazo de reojo como pretendiendo evaluar mi opinión y añade "...es que iba a dejarnos sin un duro si seguíamos así la conversación..."
Este hombre es mi heroe.

El viaje hasta la costa con CamioneroMorboso es, en cierta medida, embarazoso. Vamos los tres sentados al frente, yo entre ambos, y cada doscientos kilómetros aproximadamente Camionero empieza a acariciarme la rodilla, a resoplar y termina diciendo
"yo muy caliente...qué tal tu, amigo"
El siguiente paso es entrar en alguna de las áreas de descanso que encontramos y pasar los dos a la litera que se encuentra detrás de los asientos. Hay una cortinilla que Camionero nunca se molesta en correr pero que Comisario se preocupa de colocar en su lugar intentando colocar una barrera al menos psicológica entre él y el fornicio masculino que ocurre a sus espaldas. Además sube el volumen de la radio a tope supongo que tratando de incrementar ese aislamiento, pero dudo que no escuche gritar a Camionero
"TU AMIGO NUNCA CHUPA POLLAS"
hasta que pasado el tiempo pertinente Camionero vuelve a dejarse caer en su asiento con el culo al aire desenfundando su polla del condón con "plop" chapoteante y cara de estar teniendo el viaje de su vida, yo caigo entre ambos ajustándome el slip como una virgen pillada fuera de juego y Comisario lanza un ligero bufido y abre más la ventanilla de su lado para que corra un poco el aire.

No sé si un varón heterosexual normal habría aguantado un trayecto semejante, pero mi Comisario lo concluye y cuando por fin llegamos de nuevo a la costa y tenemos que despedirnos, le estrecha la mano al Camionero y le suelta con lo que parece absoluta sinceridad
"muchas gracias por su generosidad. Aunque sospecho que sin saberlo, ha colaborado usted con el mantenimiento de la ley, la justicia y el orden."
Camionero palmea mi trasero lanzando carcajadas y responde
"nooo, muchas gracias a su culo, que bueeeeennn viaje se lo juro, mi polla está seca, ha´ha´ha...él si es generoso..." de pronto parece agarrarle un ataque de injustificada ternura, saca la cartera y me mete en el bolsillo de la camisa dos billetes de cincuenta euros con lágrimas en los ojos "si tu querer yo pasado mañana de vuelta en dirección contraria, te dejo donde te encontré, ¿si?...carinio?"
Me da un aparatoso beso barbudo que hace apartar la vista a Comisario y volverla a todos los transeuntes e insiste
"Si tu querer, pasado mañana aquí por la mañana, ¿si?"

Cuando se marcha, ComisarioPotente me mira con ojos sarcásticos e imita a Camionero
"Entonces debo decirlo, gracias por su generosidad, porque ha sido gracias a su culo que hemos costeado esta expedición, ¿no?"
"Explíqueme cual es su siguiente paso y en la medida de lo posible, evite las ordinarieces, ¿vale?"
"Pues allí veo un McDonald's, y dado que en todo esto yo no he hecho más que aguantar el tipo y no disfrutar en absoluto, lo menos que me merezco es que me pague una hamburguesa con esos cien euros que siento un poco míos..."

Está atardeciendo otra vez, y en este momento en concreto no sé hacia donde vamos ni como vamos a hacerlo, pero me apetece pagarle una hamburguesa "a mi chico", enlazo su codo con el mío, le arrastro riendo y él lo único que hace es dejarse llevar riendo también y poniéndose colorado...


domingo, 24 de junio de 2012

FUGA HOMINIS


A una veintena de kilómetros, el tren se detiene en un minúsculo apeadero rodeado de praderas verdes y que consiste en una simple caseta blanca de ventanas cerradas y una tejabana de color rojo bajo la que los hipotéticos viajeros que aguarden pueden guarecerse de las inclemencias meteorológicas. Un algo en medio de la nada, pero ComisarioPotente levanta la vista, lo mira, me mira a mi y ordena
"vamos, coja su equipaje"
"pero qué está diciendo, ¿se ha vuelto loco?"
Él se pone en pie, me tira la maleta encima y luego asoma la cabeza fuera de nuestro compartimento para mirar a un lado y a otro, después vuelve a mirarme sudando mucho más de lo que la temperatura ambiental requiere
"el otro policía que me acompaña lleva cuatrocientros kilómetros bebiendo cerveza y ligando con la camarera del vagón restaurante" susurra "pero en cuanto pase el tren que viene en dirección contraria arrancaremos, el vendrá, llegaremos a la ciudad y tal como se le plantea el asunto creo que en menos de cuarenta y ocho horas estará usted haciendo realidad su sueño del negro enorme" Resopla exasperado, tira de mi y me empuja fuera del habitáculo siseando "lo único que le da su razón de ser a trabajos como el mío al servicio de la ley es el convencimiento de estar haciendo lo que es justo, y yo estoy sintiendo que usted no va a tener una oportunidad ahí fuera con todas estas pruebas en su contra y el estado en que están las cosas...aún así,quiero que me diga con el corazón en la mano:" coge una de mis manos entre las suyas, la aprieta con firmeza y con su mirada clavada en la mía pregunta "¿es usted inocente como yo creo que es?"
Así, tan cerca de mi, con mi mano entre las suyas y mirándome tan de cerca, creo que le diría "sí" a cualquier cosa que me dijese, lo cual me llena de rubor y no hago más que asentir como una jovencita.
Él tira de mi y cuchichea
"pues entonces cagando leches"

...cuando nuestro tren arranca unos minutos después nosotros ya hemos abandonado el pequeño andén y andamos a toda velocidad por el camino polvoriento que se supone lleva a la población a la que pertenece esa estación.
No me he entretenido en sondear a Comisario para preguntarle acerca de su forma de actuar porque qué sentido tiene buscarle razones a una situación que en el fondo me beneficia, pero en mi interior me preocupa las consecuencias que ese impulso loco pueda tener sobre su futuro profesional.
Entretanto, caminamos en silencio rodeados de prados verdes que no parecen tener ningún final con un cielo  azul que se va poniendo violáceo con la llegada del anochecer.
Por fin dice aún en voz baja como si alguien pudiese oirnos ahí en mitad de ningún sitio:
"no quiero hablar mal de mi compañero, pero cuando vuelva a buscarme y no me encuentre, pensará primero que se ha equivocado de compartimento, luego se paseará por todo el tren preguntando por mi y solo cuando llegue a la ciudad va a empezar a plantearse en qué punto del trayecto nos ha perdido.Aunque es un buen tipo, la mayor parte del tiempo su atención está un poco...dispersa, ¿entiende?"
Asiento recordando el comentario a propósito de las cervezas y la camarera sin entrar en juicios de valor.
Comisario agradece con una leve sonrisa mi discreción y concluye:
"...eso nos da tiempo de sobra para coger distancia, ¿vale?...ahora solo tenemos que buscar un medio de desplazamiento."
Le contemplo con desolación y en respuesta una bandada de grajos levanta el vuelo de entre la hierba graznando como riéndose de la ingenuidad de mi acompañante.
"Desplazamiento hacia donde" murmuro sin querer parecer un aguafiestas.
"¿Pues donde va a ser?...pues hacia el marido de la tía que le mutiló. Usted sabía hacia donde pensaba huir porque de hecho iba a encontrarse con él, ¿no es así?"
"Con billetes de avión falsificados. Puede haberme hecho creer que iba a un lado y en realidad pretender ir al otro para que no lo contase cuando usted me pillase, ¿no le parece factible?"
ComisarioPotente aprieta el paso y bufa haciendo callar a los grillos.
"¡Joder, tengo una idea!...tengo una idea, ¿vale?...más de una en realidad, pero necesitaré que no esté usted metido en la cárcel para llevarla a cabo. Ahora, si no me equivoco, encontraremos el próximo núcleo urbano después de esa loma y allí trataremos de negociar con los lugareños para hacernos con un medio de transporte...Qué, ¿qué me dice?"
Está tan ilusionado que me inspira ternura y me limito a sacar los pulgares y sacudirles vigorosamente hacia arriba para hacerle ver que estoy metido en el asunto al cien por cien, cosa que le satisface y le hace apretar el paso.
"Verá como justo cuando coronemos esa colina..."
...en efecto cuando coronamos la colina encontramos, sumido en una hondonada, "el núcleo urbano" del que me hablaba hace un momento: consiste en un pequeño grupo de casas, la mitad en estado de derrumbe y la otra mitad habitable calculo que se encuentra en su mayor parte deshabitada. Sólo en una de ellas se ve luz en unas cuantas ventanas, así que las opciones se encuentran restringidas justo a eso, a una.
"En las películas la única casa habitada del pueblo siempre está ocupada por el asesino de la motosierra", arguyo con voz estrangulada.
"Ha visto usted demasiados telefilmes americanos" sentencia sin aflojar el paso "además es eso o nada, y entre ambas opciones tendremos que quedarnos con "eso", ¿no le parece?"

Cuando ComisarioPotente golpea la puerta el gallinero contiguo se llena de cocoricos de protesta y una vocecilla fina pregunta
"¿siiiii?"
ComisarioPotente saca su placa y la enarbola en todas las direcciones del espacio como si estuviésemos rodeados de cámaras ocultas diciendo en el plan de héroe machote que tanto me provoca
"¡Policia!...estamos en medio de una investigación policial y nos gustaría pedirle su colaboración..."
La puerta se abre de sopetón y al otro lado de una gran escopeta que se apoya en la entrañable entrepierna de Comisario, se halla una ancianita de pelo blanco y bata guateada.
"No se crea que soy tan torpe, me siento capacitada para volarle los huevos y luego dejar cojo a su compañero para tener tiempo suficiente de llegar a un teléfono y pedir ayuda. DOCUMENTACIÓN."
Los cañones del arma apoyados contra tan delicada parte consiguen una cierta flexibilidad de Comisario, que tiende su carnet profesional y permite que Ancianita compare fotografía y cara real.
Ancianita arruga la nariz como si solo estuviese conforme a medias
"Está usted mas flaco.¿Le hacen trabajar demasiado?"
Comisario separa los brazos con las palmas hacia arriba en plan "ya-sabe-usted-lo-que-es-esto", luego la abuelita me apunta a mi
"¿Y ese?...¿donde están sus papeles?...¿no es policía también?"
"Es "dice Comisario tras tragar saliva sonoramente " un colaborador civil...de verdad señora sentimos muchísimo alterar la paz del lugar en el que vive pero necesitamos ayuda, de otra forma jamás se nos hubiera ocurrido perturbar su..."
"Entiendalo, señor Comisario, una mujer sola en medio de esto es una presa fácil para cualquier desaprensivo" ataja Ancianita en tono cabal de presentadora de noticias "y como sin duda comprende, tengo que preguntarme qué narices hacen aquí y de donde se han caído." luego me mira a mi de reojo y añade "....este tiene una mirada furtiva que no me gusta un pelo. ¿Seguro que no le lleva secuestrado?"
"En plena operación policial hemos tenido que bajarnos del tren y hemos venido caminando desde el apeadero " dice ComisarioPotente componiendo una perfecta cara de tipo honrado "No puedo darle más información pero el caso es que necesitaríamos un vehículo y nos preguntábamos si usted o alguien del pueblo podría facilitarnos algún medio de..."
"Soy una anciana sola e indefensa, ¿cree que me paseo en Land-Rover por las mañanas cazando perdices?"gruñe Ancianita algo mosca, y ComisarioPotente visto lo visto potencia su lado de ángel protector.
"Si usted fuese mi abuelita, y no tengo esa fortuna porque la mía falleció hace un tiempo" ( el muy truhán consigue con eso que Ancianita se ponga una mano en el pecho y se muerda el labio inferior con los ojos brillantes ) "la recomendaría que hiciese justo lo que hace usted para salvaguardar su integridad y su propiedad. Nunca alteraría la calma de una dama en su castillo de esta brusca manera pero, en realidad, no tenemos otra alternativa, puede creerme."
Lo de la dama-en-el-castillo a mi me suena a jilipollez absoluta pero Ancianita le contempla como si fuese a revolverle afectuosamente el flequillo en cualquier momento pero en vez de decir "tenga las llaves de mi coche" le suelta
"¿Sabe que se da usted un airecillo al Rober Refor?...incluso más interesante con esa media barba, jijiji"
ComisarioPotente no precisa fingir un rubor, se contempla la punta de los zapatos y ¡por fin! deja de ligar
"¿entonces sabe donde podríamos conseguir un vehículo?..."
"bueno, yo tengo un viejo 600 detrás, en el patio de las gallinas, que mi nieto estuvo poniendo al día hace dos meses cuando estuvo aquí con sus amigotes y necesitaba algo para moverse por aquí...oh Comisario, tenía que verle, a él, a sus amigos y a esas chicas con los párpados pintados de verde enseñando la ropa interior y fumando cosas que luego me hacían tener alucinaciones durante horas, ¿puede imaginarlo?"
"es terrible la pérdida de valores de una parte de la juventud, ¿verdad?" contesta en tono grave ComisarioPotente como si tuviésemos todo el tiempo del mundo y pudiésemos discutir la clase de compañías que frecuenta el tipo impresentable que debe ser su nieto "no tengo hijos todavía, pero si los tengo me gustaría conocer una fórmula mágica para conseguir que creciesen al margen de cierto tipo de cosas"
Comisario habla como el presentador de un reality-show y me estoy temiendo escuchar de un momento a otro el "chof" que va a sonar cuando las bragas empapadas de Ancianita caigan contra el suelo.
"oooh, no se crea, él es un chico estupendo y me llama casi todos los meses para saber como me encuentro, pero no sé si esas compañias son las más adecuadas, sabe..." ha dejado la escopeta a un lado mientras piensa en sus cosas, luego vuelve a la realidad y continua "...total que mi nieto se entretuvo esas minivacaciones en poner en marcha el viejo cacharro, y cuando mi único vecino me lo ha pedido para llevar huevos al pueblo, ha dicho que va bastante bien. Oh, Dios, Comisario, espero que no se encuentren ningún huevo entre los asientos porque esas malditas terminan por meterse por todos los sitios..."
"que pasa, sus gallinas saben como abrir la puerta de un 600?" mascullo yo ahora logrando que tanto Ancianita como Comisario me miren recriminatoriamente.
"le tengo con las puertas abiertas hace tres días porque el mismo vecino me lo pidió para cargar unos sacos de estiércol de vaca que alguien le compró para su huerto" respondió ella haciendo como si yo no existiese "y en fin, hasta que localizó al tipo tuvo los malditos sacos en mi coche todo un día con el sol sobre la chapa.  Cuando lo trajo de vuelta, ahí no podían entrar ni mis gallinas...pero después de estos días ventilando, ¡quien sabe!, ya sabe como son esas pequeñuelas, siempre intrigando"
"De acuerdo" dice ComisarioPotente al parecer impávido ante la perspectiva de pasar un montón de horas conduciendo a 60 kilómetros por hora oliendo a estiércol de vaca y a caca de gallina "entonces tengo que pedirle que nos ceda el vehículo para nuestro trabajo, con mi palabra de que apenas terminemos con él le será devuelto tal y como lo encontramos...¿qué me dice?"
Ancianita se rasca un mentón un poco peludo y termina por decir
"Bueno, esto ya lo he visto yo en las películas de "Colombo" y "las calles de San Francisco", la policía coge los coches de la gente, sale corriendo y luego nadie explica como hace esa gente que dejan a pie para recuperar sus vehiculos. Sabe de lo que le hablo, ¿no?"
Pienso si ahora ComisarioPotente no lanzará un gancho a la barbilla de Ancianita, la dejará noqueada en el suelo y aprovecharemos para salir zumbando de ahí pero en su lugar le tiende una tarjeta que permite coteje ella con su identificación y anuncia solemne
"tiene mi palabra de que yo mismo traeré su coche de vuelta. Y yo siempre cumplo mis promesas."
A mi mismo me resulta imposible no creer en sus promesas así como está con el atardecer encarnado tiñendo de rosa sus mejillas y el viento revuelto por la brisa de la tarde. A Ancianita se ve que tampoco, porque rie guardando la tarjeta en un bolsillo de la bata y nos hace un gesto para que la sigamos a través de un sendero que rodea la casa lleno de piedras y barro apenas seco.
"Supongo que no se quedarán a cenar, si están en plena misión, pero les prepararé unos  bocadillos mientras sacan el coche de aquí, y cuando me lo devuelva, le prepararé algo como Dios manda"
ComisarioPotente sonríe como un actor de Hollywood y tanto Ancianita como yo suspiramos, cosa que la hace mirarme, luego mirarle a él y susurrarle lo bastante alto como para que pueda oírla yo:
"Pero cuidado con ese tío... le mira a usted como si quisiera...ya me entiende"
"¿Como si quisiera qué" pregunta mi Comisario adorablemente confuso.
"...pues como si le gustara usted, hombre...hay miradas que no se escapan a los ojos de una mujer, por vieja que una sea"
Comisario hace como que no oye nada y se ríe estrechando suavemente por los hombros a Ancianita
"vamos, no sea modesta, es usted una mujer de hierro, una superviviente. No sabe como envidio a la gente a la que el tiempo hace tan fuerte como a usted."...

Antes de que contratemos a Comisario para un manual de frases hechas sobre como levantar el ánimo a la tercera edad, ya estamos dentro del 600 lleno de plumas de gallina y tal como ella predijo, con media docena de huevos entre un asiento y otro. Todavía flota un fuerte aroma a caca de vaca cuando arrancamos y nuestra benefactora nos despide con lágrimas en los ojos.
"¡Buena suerte¡" dice Ancianita despidiéndonos desde la puerta de su casa con el cielo envuelto en llamas del crepúsculo a modo de una Escarlata O'Hara muy entrada en años.
"Nos vemos pronto" dice Comisario con la media sonrisa de Clark Gable pero sin bigotito, y arrancamos rumbo a nuestra aventura personal...

...un par de horas más tarde, ya de noche, estamos estacionados en un área de descanso de la autovía, Comisario con la cabeza metida en el motor sujetando una linterna y echando una botella de agua en no-sé-qué sitio mientras yo inspecciono los contornos. Hay varios coches aparcados en la penumbra, y el movimiento de hombres en la oscuridad me hace intuir que estamos en uno de estos sitios de carretera dedicados al cruising. Unos metros más allá un tío sentado sobre el capó de su vehículo se masajea la polla y hace visajes mirando el culo en pompa de Comisario que sigue enfrascado en la mecánica del 600 ajeno al espectáculo gratuito que está proporcionando al personal.
Me veo en la obligación de acercarme, reclinarme un poco sobre él y decir:
"Ahí detrás hay un tío que se la está cascando por encima del pantalón mirándole a usted el culo."
Comisario   pega un brinco y se da la vuelta mirando a todas partes y mirándome a mi. Me enfoca con la linterna la cara y susurra con cara de cabreado
"Pero qué le pasa a usted, ¿está enfermo? ¿No puede dejar de pensar en lo mismo?" luego se da la vuelta, saca la placa sosteniéndola en alto y grita "¡Soy policía! ¡Cualquier conducta ofensiva e inmoral puede ser fruto de responsabilidades penales, quedan advertidos!"
Esto causa un efecto similar a meter un zorro en un corral, es decir, no queda una gallina en un momento.
Luego se vuelve hacia mi, con el rostro algo sudoroso brillante a la luz de la luna y una expresión indescifrable que oscila entre el alivio y la inquietud antes de decir:
"Bien, ahora qué me tiene que decir"
Se pasa la punta de la lengua por el borde del labio superior y yo confundo las señales porque le agarro por la nuca y estrello mi boca contra la suya durante unos segundos.

Después me separo de él aguardando su reacción, y cuando esta llega consiste en proyectar su puño hacia mi barbilla y conseguir que en torno a mi se apaguen una vez más todas las luces...

lunes, 18 de junio de 2012

REDITUM ITER


"Si no hay cuerpo, no hay delito, ¿no?" le pregunto a ComisarioPotente que comparte conmigo en soledad un compartimento en el tren de vuelta a mi ciudad.
Comisario continúa con el look playero: una camisa blanca arrugada desabotonada lo bastante como para ver el vello rubio oscuro que se riza sobre su pecho, y una bermudas color beige que permiten apreciar unos muslos fuertes y peludos. Cuando ve que le estoy mirando las piernas, las cruza como una colegiala y responde con cierto embarazo:
"No estoy en disposición de responder a ninguna de sus preguntas. Le recomiendo que se busque un buen abogado cuando lleguemos y trate de salir de este embrollo en el que se encuentra metido."

...pasamos al menos veinte minutos viendo correr el campo a través de la ventanilla,luego tengo que dar un golpe al cristal y gritar
"¡es que....¿es que le da igual toda esta historia de mierda en la que estoy metido?...usted lo ha seguido casi desde el principio, ya sabe lo que ha pasado..."
"no" responde mirándome por fin con cierto desasosiego "no pretenda buscar ahora mi colaboración porque desde que le conozco, ha estado haciendo lo que le ha salido de los cojones sin contar por un momento en mi persona, que a fin de cuentas soy el representante de los cuerpos de seguridad del Estado en toda esa movida. Mi cometido ahora es llevarle de vuelta, entregarle a las autoridades y, como se suele decir, si te he visto no me acuerdo".
Añade un "jeje" a todo eso que no puedo compartir, y volvemos a perdernos un rato en la contemplación del paisaje de ahí fuera.

Cuando pasa un tiempo intedeterminado es él quien rompe el silencio para decir
"...me supongo que es todo cosa de ese mundo gay, ¿verdad?...toda esa promiscuidad y ese follar con unos y con otros como si la gente fuesen trozos de carne y no personas."
Tengo que enarcar las cejas un poco sorprendido
"vaya, qué buen conocimiento del ambiente demuestra usted. ¿Ha tenido alguna vez relaciones sexuales con un hombre, comisario?"
"la verdad es que no" responde sin mirarme "y dejando a un lado el que mis relaciones con las mujeres hayan sido siempre totalmente satisfactorias, encuentro que la forma de relacionarse entre ustedes tiene un componente sórdido que no acabaría de aceptar"
"entonces no se lo ha planteado nunca"
"el qué"
"el tener un encuentro sexual con un hombre"
Ahora parece indignado
"¿No lo ve? Usted mismo lo está planteando de esa manera. "Encuentro". Que ocurre, ¿para usted no significa nada el practicar sexo con otra persona?"
"Y porqué tiene que significar algo. Es una cuestión puramente fisiológica. ¿Significa algo para usted cada vez que se come un filete con patatas?"
"Qué perspectiva tan hermosa de las relaciones entre personas. Compararlas con un filete con patatas.  Ojalá siga viéndolo todo así incluso cuando no le queden dientes para masticar filetes."
Ahora soy yo el que se vuelve hacia la ventana y se encierra en un silencio sin concesiones.

A Comisario se le cierran los ojos, lucha contra el sueño cada vez un poco menos hasta que se le ladea la cabeza, el hermoso mentón se le descuelga y las palmas de las manos se le caen a ambos lados del cuerpo mirando hacia arriba, en un simulacro de indefensión total.
Estoy sentado frente a él, también en pantalones cortos, de manera que no me cuesta demasiado dejar caer una de mis rodillas contra la suya, para sentir la estática del vello de sus muslos contra mi piel.
No hago más que mecer un par de milímetros arriba y abajo para sentir su contacto, y cual es mi sorpresa al descubrir que en la descuidada y expuesta entrepierna de sus bermudas algo está tomando consistencia. Trato de espiar en sus ojos cerrados buscando una rendija de contacto con la realidad y contacto con lo que está sucediendo pero su labio inferior continúa adorablemente inerte y su respiración es lenta y profunda.
Sé que en estas circunstancias, a punto de ser detenido con cargos y todo eso, no debería de sentirme sexualmente operativo, pero de alguna forma se me ocurre que esa será la última vez que tendré a ComisarioPotente a mi alcance, y eso me hace ser osado.
Libero mi pie de una sandalia y lo coloco justo ante ese paquete en crecimiento que tengo ante mi.
Luego lo apoyo en ese bulto cálido, saco mi polla y empiezo a masturbarme.
Todo sucede bastante rápido. Me la meneo a toda prisa esperando no despertarle pero a la vez los dedos de mi pie frotan el bulto de su polla abajo y arriba siguiendo mi ritmo, él se abre un poco más de piernas  y suelta un ligero "aah", pero es igual porque yo por lo prohibido y furtivo de la situación no tardo más de medio minuto en soltar un surtidor de leche que cae sobre uno de sus muslos y deja un lamparón sobre sus bermudas.
Para mi satisfacción, casi al mismo tiempo aparece una gran mancha húmeda en el lugar donde supongo de encuentra la punta de su polla mientras se le estremece ligeramente el cuerpo y se lame el labio inferior.
Ya con mi polla en su sitio me hago el dormido cuando él da un respingo, se mira el paquete, me mira a mi y sin decir ni media palabra baja su maleta y saca otro pantalón para quitarse el que lleva.
No lo puedo creer, el espectáculo es demasiado bueno como para disfrutarlo así sin ni siquiera intentarlo.
Sus calzoncillos blancos, a pesar de estar resplandecientes, también están un poco desgastados y casi sin esfuerzo puedo vislumbrar la raja de su trasero al agacharse y luego el bulto aún sonrosado de su polla cuando se vuelve de frente. Le veo contemplar con visible embarazo su corrida, después saca un pañuelo de papel, trata de secar al máximo el desaguisado y por fin se calza unos vaqueros bastante ajustados que no auguran que vayamos a tener un viaje relajado sexualmente.
Yo me estiro como un gato cuando el vuelve a dejarse caer en el asiento, frunzo el ceño y pregunto
"¿se ha cambiado de pantalones? ¿le incomodaba el roce casual de mis muslos?"
Se pone horriblemente colorado al contestar
"no sé si se ha dado cuenta pero sus comentarios casi siempre resultan improcedentes"
Hago como que le saco la lengua e intento dormir de nuevo.

En realidad consigo dormirme, y cuando vuelvo a abrir los ojos ya está anocheciendo ahí fuera y ComisarioPotente me contempla con un poco de cara de susto y las manos cruzadas sobre el regazo.
Algo en su expresión de virgen rodeada de mercenarios me hace saltar, me siento sobre sus piernas, pego mi pecho contra el suyo y le susurro
"Vamos, joder. De lo que pase aquí ahora no voy a decirle una palabra a nadie. ¿quien iba a creerme?...y sobre todo, ¿a quien iba a importarle?"
ComisarioPotente me aparta de un empellón haciéndome dar con la cabeza contra la ventana.
Luego parece arrepentido y murmura
"¡perdon!...no debería haber reaccionado así, lo siento"
Ahora es él quien se sienta sobre mis muslos, me contempla como si no me llevase viendo enfrente suyo todo el viaje y me pasa la punta de la lengua primero por la barbilla y luego sobre los labios.
Deslizo mi mano por una de sus piernas muslo arriba con delicadeza para no asustarle, hasta llegar a su polla que de nuevo está ahí dentro tiesa.Visto esto le agarro el culo y le atraigo hacia mi.
"No puede ser...tengo una novia, una chica que trabaja en asuntos internos..."dice, pero a la vez me revuelve el pelo con las manos y empieza a buscar mi boca cada vez con más insistencia "¿como voy a explicarle esto?...no, ¿como me lo explico a mi mismo?"
"No hace falta buscar explicaciones...piensa en el filete...piensa que seguro que mañana a estas horas me estarán metiendo en un calabozo horrible y no volverás a verme el pelo...puede ser la última oportunidad que tengamos de hacer esto, ¿te das cuenta?"
...un segundo después tengo mis tobillos sobre sus hombros y su polla presionando contra mi culo mientras me mira de cerca con el rostro ruborizado y los labios brillantes...
"No voy a perdonarme esto después, ¿lo entiendes?"
Le pongo una mano en la nuca y tiro de su cuello hacia mi para besarle...

Un traqueteo del tren un poco más violento de lo normal me hce abrir los ojos y veo que ComisarioPotente en realidad está sentado junto a la ventana, tratando de poner la máxima distancia posible entre nuestros organismos mientras mantiene la vista perdida ahí fuera.
"No se lo va a creer, pero estaba soñando que usted y yo estábamos echando un polvo aquí mismo." digo risueño.
"Me lo creo. Ahora cierre los ojos y siga soñando" masculla tras dirigirme solo una muy breve mirada indescifrable.
Tengo que chasquear la lengua para demostrar mi frustración.
"Vamos hombre. Mañana a estas horas "digo con la esperanza que la línea que seguía en el sueño de resultado "estará en un calabozo con algún hombre de color enorme que me obligará a chuparle su polla gigantesca durante horas para luego darme por el culo con total impunidad. ¿No cree que necesito...antes de eso...unos instantes de luz?"
Comisario no se siente ni mínimamente conmovido, solo lanza una carcajada seca y contesta
"No. Más bien creo que si eso es así, se lo va a pasar usted divinamente."
Sin embargo, a pesar de sus palabras veo la expresión de sus ojos oscuros y lo que veo ahí no es ni ira, ni ironía ni desprecio, es...
...no sé lo que es.
Lanza un breve suspiro, vuelve a mirar por la ventana y no volvemos a hablar hasta que no estamos casi de vuelta en la ciudad....

martes, 12 de junio de 2012

EXITUS VOLO


Según el plan, el manojo de billetes de avión que tengo van a trasladarme en un vuelo con escala en Nueva York y enlace en los Angeles hasta el mismo Hawaii, y después de allí una avioneta en plan aventurero me dejará en una paradisiaca isla donde está recien instalado algo parecido a la corriente eléctrica y los nativos todavía salen huyendo cuando pones en marcha el aparato de radio.
"Yo te seguiré un par de semanas después" me explica MaridoPerfecto preparándome una maleta llena de bermudas, camisetas, lociones antimosquitos y crema bronceadora " a lo sumo tres. El tiempo justo para liquidar todos los asuntos que queden aquí pendientes y poder desaparecer sin obligaciones ni responsabilidades.¿Que tal?" me hace levantar la barbilla, clava en mi esos ojos azules que tienen un efecto hipnótico en mi y me besa dejando resbalar su lengua sobre mis labios "...no tienes que tener miedo...ahora no vamos a cagarla, ¿verdad?..."
Ahora su boca se entreabre y al momento mi polla se pone en posición de firmes ahí abajo sin necesidad de apretar la puta pera de goma.
No sé.
Todo es tan maravilloso como se puede imaginar: un destino paradisiaco, una aventura, y un amante-compañero del que no me siento capaz de llegar a cansarme nunca. Y a pesar de todo, mi estatus de juguete sexual al que MaridoPerfecto dirige y manipula me incomoda, porque siento estar bloqueado y en la obligación de nada más dejar que las cosas a mi alrededor acontezcan...
Luego está el pequeño detalle de que es una especie de asesino en serie, y en breve, cuando termine de deslizarme la polla en el culo con la infinita delicadeza con la que sabe hacerlo para a continuación follarme de una manera que me hace desear agarrarme a su cuello como si cruzáramos volando un precipicio...
...cuando termine, va a hacer la maleta y va a ir a cargarse a su mujer.
La misma tía que me capó sin contemplaciones, sí, y no debería sentir nada, en todo caso que me hiciese un reportaje fotográfico de como transcurre todo el asunto, pero...pero no sé. Me pesará la educación judeo-cristiana, me pesará la escala de valores, qué sé yo, pero pienso que si puedo evitar que alguien más abandone este mundo por esta oscura historia que sin querer he generado, tengo que intentar evitarlo. Porque la sombra de esa nueva muerte va a pesarme toda la vida, y con eso sobre mi conciencia, ¿que futuro nos espera a mi y a MaridoPerfecto en la isla paradisiaca?...
...MaridoPerfecto se estremece, presiona sus caderas empujando su miembro con fuerza dentro de mi mientra se corre, y a continuación yo también me derramo hasta sentir que se me doblan las rodillas y se oscurece mi visión.

...el caso es que cuando he terminado, mis rodillas siguen cediendo y el mundo perdiendo nitidez en torno a mi, y aunque ha sido un buen polvo no es como para hacerme perder el sentido, ¿no?...
MaridoPerfecto me está sujetando en brazos y con cuidado me arrastra a la cama mientras dice en voz baja
"...te vas a enfadar, seguro, pero tenía que drogarte con algo para evitar que hicieras lo incorrecto..."me besa en el nacimiento del pelo mientras me tumba en la cama y continua susurrando"...que eres tan buenazo que seguro ibas a ir detrás mío a impedir que me cargase a esa puta, lo sé...pero mira, ahora vas a quedarte KO...totalmente KO, ¿sabes?...creo que serán doce horas más o menos y para cuando te despiertes vas a poder agarrar los billetes y marcharte porque todo lo que tengo que hacer ya estará hecho...¿lo has entendido mi amor?...¿o ya te estás yendo?"
Lo último que contemplo son sus ojos de ese azul de las mañanas claras de invierno, antes de desaparecer.

...al abrir los ojos el estómago está dando vueltas en mi interior, tengo que darme la vuelta con rapidez sobre la cama para vomitar en el suelo en vez de sobre las sábanas.
Es de noche cerrada, pero un despertador a mi lado está piando sin cesar señalando que son las 3 de la mañana. Sobre él, una nota:

"Tu avión sale a las seis. Tienes tiempo justo de darte una ducha y salir volando.
Te quiero"

Junto a la cama en un taburete hay una camisa, unas bermudas y unas zapatillas, aparte de la maleta que ya me estaba terminando de hacer antes de anestesiarme.

Bien, ¿y ahora qué?

En cualquier manual de la Doctora Amor figura que está terminantemente prohibido el narcotizar a tu pareja habitual para hacer cosas que si ella o él estuviesen despiertos tratarían de evitar. Ahora qué es lo que se supone que debo hacer: ¿seguir actuando de acuerdo con su plan o mandarlo todo a tomar por el culo y demostrar que no tengo nada que ver con la historia?
Cierro los ojos y paso revista a lo que me espera si digo que no y vuelvo a retomar mi vida donde la dejé:
el trabajo poco estimulante -suponiendo que todavía esté a tiempo de retomarlo donde lo dejé-, los polvos echados de mala manera entre páginas de contactos, zonas de cruising y el disco-bar cutre donde va la gente a ligar. La actitud cínica de estar de vuelta de todo y no importarme nada que a fuerza de repetírmela tantas veces termino por creerme, hasta el punto de que solo cuando las cosas se ponen realmente mal soy capaz de darme cuenta de lo que es mi existencia en realidad.
Esas son las posibilidades: el otro lado del mundo, una playa y una isla con MaridoPerfecto, o dar marcha atrás y empezar en el punto donde comencé a perder el control de todo.
¿Tu que harías?

...

...yo elijo isla.
Paso por la ducha, luego me pongo obedientemente la ropa que mi amante ha dejado allí dispuesta, agarro la maleta y salgo zumbando en un taxi al aeropuerto.
Con la asombrosa ligereza de corazón que te da el pensar que todas tus obligaciones, compromisos y rutinas que te encadenaban a tu vida diaria acaban de saltar por los aires, y eres ¡LIBRE!...

...cuando llego ante la azafata y le tiendo los billetes no puedo esperar que me los devuelva con la sonrisa característica de las profesionales aereoportuarias y me diga
"es una broma, señor?"
"n-n-n-no la entiendo" acierto a balbucear mientras todo el mundo tras de mi en la cola empieza a chasquear la lengua
"estos billetes no son válidos" me contempla con algo que por un momento parece piedad y pregunta "¿los ha comprado usted?"
"no, claro que no"
"bien, pues siento decirle que a quien le haya encargado la compra, le ha engañado. Son copias, falsificaciones, no son billetes reales, ¿entiende lo que le quiero decir?"
Es cierto que no he echado más de un vistazo a lo que MaridoPerfecto me dejó porque no se me había pasado por la imaginación que él...
En descargo de la chica de la ventanilla debo decir que parece de verdad triste al decir
"Tiene que abandonar la cola, señor. Si ha sido víctima de un fraude, acuda a la ventanilla de información y allí podrán atenderle, ¿de acuerdo?...lo siento"
...¿que supone todo esto en la cadena de acontecimientos?...¿qué papel estoy desempeñando en el transcurso de las cosas?...
Dado el ritmo de los acontecimientos no me sorprende ver a ComisarioPotente, desaliñado como siempre con una americana arrugada y una camisa sin corbata, mal afeitado una vez más y el pelo revuelto, pero sorprendentemente guapo.
"Lo ha hecho todo al revés" me dice enfadado "¿ha contado conmigo para algo en todo lo que lleva haciendo de un tiempo a esta parte?"
"La verdad es que no. ¿Ha pasado algo?"
Dos tipos altos me cogen cortesmente por los codos y ComisarioPotente resopla haciendo volar su flequillo.
"Vamos a hablar"

Los lugares que buscan las autoridades competentes en los aeropuertos para mantener una conversación dentro de la intimidad resultan casi siempre fríos, deprimentes y te hacen sentir la sensación de estar metido en un lío de cojones.
En esta ocasión, a pesar de que ComisarioPotente intenta sonreir con delicadeza me supongo que en atención al conato de relación que existe entre nosotros, me resulta igual de frío e inquietante que la vez que un chucho anti-drogas se paró ante mi maleta meneando el rabo volviendo de viaje y pasé cuatro horas en un cuartito similar hasta que decidieron que el perro debía estar resfriado y por eso ladró al equipaje equivocado.
"Se iba usted de viaje" me dice con expresión de tristeza en su cara de Robert Redford venido a menos.
"Lo estaba intentando,sí,pero alguien me ha tomado el pelo".
"¿Qué quiere decir?"
Tiré los billetes sobre la mesa que había entre los dos para que los echara un vistazo.
"Son falsos. Me ha hecho creer que me mandaba al otro lado del mundo para desaparecer, he actuado como el jilipollas que él esperaba que yo fuera, y aquí estoy. ¿Satisfecho?"
"Me temo que no. Su agresora, la mujer que le...amputó, ha desaparecido. En su habitación hay rastros de sangre y en un arbusto junto al hospital han encontrado una navaja... tiene más sangre de ella y además, sus huellas dactilares. ¿Puede justificar donde ha estado las últimas doce horas?"
"¿Mis huellas?" chillo escandalizado,luego pienso en lo que puede haber hecho MaridoPerfecto conmigo mientras yo me encontraba inconsciente y cierro la boca, tratando de suponer la forma en que pueden haber evolucionado los acontecimientos.
La deducción final es clara: ese hijo de puta me ha utlizado como cabeza de turco para cargarse a su mujer y largarse con la pasta.
Me pellizque un momento para comprobar que mi vida no se había convertido en una novela barata de serie B...
...pero después del pellizco, seguí allí.

sábado, 9 de junio de 2012

INSANUS AMOR


Cuando veía películas en el cine en que el malo o mala malísimos contaban con un amante incondicional que conocedores de lo que ha hecho siguen a su lado, siempre me decía para mi que en todo hay un límite, y hay una barrera acerca de las cosas que tu pareja puede llegar a hacer para que puedas transigir con ellas en virtud del amor que le profesas.
Bueno, pues aquí estoy yo, totalmente colgado por un tío que se ha cargado al menos a otros tres tipos y luego se ha entretenido con el encantador detalle de presentar sus partes nobles como carne picada en una lata de comida para gatos.
...suena horrible pero en los días siguientes no sé qué pasa que puedo olvidarlo: despertamos abrazados con una sonrisa, prepara el desayuno él mientras el sol de la mañana le cubre el cuerpo desnudo de motas doradas, luego follamos, a veces hasta mediodía y después salimos a comer abrazados por la cintura.
No nos privamos de nada, comemos, bebemos y reimos hasta que su pierna se roza algo más de lo necesario con la mía, o mmi mano busca la suya por debajo de la mesa, entonces veo como se humedece los labios, se le llenan los ojos de ternura y me susurra que le gustaría volver a la habitación...
...entonces volvemos al hotel y seguimos follando durante el interminable atardecer, nos metemos en una bañera con velas alrededor y volvemos a suspender el tiempo nada más ensimismados en la mutua compañía hasta que me levanta, nos vestimos y salimos a las calles con el cielo de color rosa sobre la cabeza a recorrer la noche, abrazados, sin pensar, sin recordar...

En efecto, apenas MaridoPerfecto intuyó la presencia constante del comisario en torno a mi casa, se las arregló para utilizar la susodicha salida de emergencia y escapar los dos a la costa, a la búsqueda del mundanal ruido en vez de a la viceversa.
Se da la circunstancia, en cierto modo agravante, que MaridoPerfecto queda por el momento a disposición de los bienes de su esposa por algún tipo de clausula o artilugio legal que no acabo de entender. Lo que si entiendo es que estamos viviendo en un hotel de cinco estrellas a un ritmo endiabladamente loco, y me parece de justicia divina que todo ese bienestar, esa comida y esos polvos, estén costeados por la tía que tuvo la idea de caparme con un cúter.
Tampoco me siento culpable por mi rubio ComisarioPotente porque, a fin de cuentas, desde que estoy con el asesino se han parado las muertes y por lo que yo sé la ciudadanía puede respirar tranquila,,,

..exactamente no sé cuanto tiempo llevamos viviendo la vida loca, puede que más de un mes, cuando una noche la situación da un giro. Estamos en un local de ambiente tomando una copa mientras un generoso rebaño de chicos babeantes pegan saltitos a nuestro alrededor -sobre todo alrededor de MaridoPerfecto- pensando quizás que nos van a prendar los encantos de la juventud. Pero MaridoPerfecto está en otro sitio, con la mirada perdida y la copa sin tocar enfrente a él desde hace más de media hora.
Le rodeo los hombros con un brazo, le doy un beso en la mejilla y pregunto
"que pasa, que estás en otro sitio. ¿puedo ayudarte en algo?"
MaridoPerfecto me sonríe de esa irresistible manera ( esa misma que a veces me planteo si no fue lo último que vieron sus víctimas ), me aprieta contra él y hunde la cara en mi hombro de manera que no puedo ver su rostro cuando dice
"Se están agotando los fondos de las cuentas comunes, y si quiero quedarme con el total de la pasta tengo que quedar como único heredero...¿entiendes lo que te quiero decir?"
Supongo que él nota como me contraigo entre sus brazos porque me separa de él solamente un poco para luego contemplarme con infinita tristeza
"Es que no te das cuenta...quiero poner millas entre nosotros dos y este puto país...quiero pasar el resto de mi vida contigo sin tener que pensar en que nadie va a aparecer al siguiente minuto a joderlo todo...¿tan complicado es de entender?"
Un chico rubio con un flequillo que apenas deja ver sus rasgos se interpone entre nosotros dando saltitos y cacareando "¿QUE TAL, GUAPOS, HACE UNA FELATIO ENTRE AMIGOS?"
MaridoPerfecto le barre de un guantazo como si fuese un mosquito y me parece oportuno porque yo tengo que hacer una pregunta y él tiene que darme una respuesta, nada que no sepamos ya pero que necesitamos oir en voz alta.
"¿Vas...vas a cargarte a tu mujer?" digo en un susurro porque me parece que decirlo así va a romper el hechizo y voy a ver sin filtros al asesino que tengo delante.
MaridoPerfecto me estruja contra él unos segundos, luego se separa y me dice al oido
"Ahora que he encontrado el amor contigo no voy a dejar que se vaya a tomar por el culo por algo tan trivial como el dinero....por favor, dime que lo entiendes, dímelo" suplica apretándome de nuevo contra sí y yo estoy tan confuso y porqué no decirlo, tan asustado, que no puedo decir nada de momento. Después logro decirle al oido
"pero y tus hijas...¿que lugar ocupan en este plan?"
MaridoPerfecto me da la vuelta, me estrella contra la pared y apretando su cadera contra la mía, susurra en mi oreja
"no hay hijas...¿es que no lo entiendes?..." me acaricia el cabello de la la nuca y cuando sigue hablando su boca está tan cerca de mi oido que siento el roce suave de sus labios "...como te puedo hacer comprender que desde el momento en que te conocí puse mi contador a cero y todo empezó a suceder a partir de ahí"
Me abraza fuerte y yo también le abrazo, porque no puedo hacer otra cosa.
Porque siempre desee escuchar precisamente esas palabras, y porque siento que le amo sin concesiones ni medida.
Pero a la vez siento que todo se me está yendo de nuevo de las manos.
"Escucha" me dice ilusionado "voy a comprarte un billete de avión y vas a marcharte a donde yo te diga...luego tienes que desentenderte de lo que pase aquí, tener paciencia y esperarme porque cuando llegue a tu lado voy a hacerlo liberado de toda esta mierda de vida que tenemos que dejar atrás...¿qué me dices?"
No me atrevo a decir nada, solo siento que después de todo quizás sea una buena idea el desaparecer de todo aquello y que sean los que se queden los que se entiendan con las consecuencias.
Aún con todo, al final termino por preguntarle en voz baja
"...no vas a cargarte a nadie más, ¿verdad?..." se cruzó por un momento la imagen de mujer derrotada de SecreGordi mirando por su ventana, diciendo en su mirada que llevaba sobre sus hombros toda la carga que se veía capacitada para soportar y traté de que me mirase a los ojos al preguntar de nuevo.
"¿verdad?"

MaridoPerfecto entiende y aplica esa máxima que poca gente comprende consistente en que, cuando uno no tiene nada que decir, casi siempre lo mejor es no decir nada.

jueves, 7 de junio de 2012

REDIT



Retornos.

Después de la vorágine de sexo germano sadomaso, prostitución ilegal y acoso en el trabajo que he vivido en mi escapada a la costa, el agujero de provincias del que siempre deseé salir se me presenta diferente y nuevo.

Por lo menos limpio, ordenado y en cierta medida predecible.

Lo que desde luego no es predecible es encontrarme a MaridoPerfecto sentado en las escaleras ante la puerta de mi apartamento con una pequeña bolsa de deporte que supongo es su equipaje inmediato y cara de cachorro abandonado.

"¿Q-que haces aquí? gruño a pesar de encontrarle todavía más guapo que la última vez que le vi.

"Tu amiga la de la boda, cuando la llamaste para decirla que volvías y ese rollo...yo la había pedido que me avisase cuando supiese algo de ti, y ella se ha portado bien" me dice sin levantarse del escalón con una bella barba de tres días y el cabello revuelto. Va con unos vaqueros viejos y una camiseta pero con ese esqueleto suyo está tan formidable que solo puedo quedarme un poco babeante al verlo ahí, esperándome. Sin duda percibe como he empezado a salivar porque sus ojos azules cobran brillo y se pone en pie, presionándome un poco contra la puerta de mi casa.

"Joder...¿como me has dejado así todo este tiempo?....se me ha ido la vida entera a tomar por el culo después de lo nuestro...no pensé que ibas a desaparecer así por las buenas" dice presionando su pelvis contra la mía. Y vale, sé que fue él quien llevo mi polla en un tupperware para que me la volviesen a implantar, que no tiene la culpa de lo jodida de la cabeza que está su esposa y que si hay que valorar, somos responsables al 50% de todo lo que ha pasado. Pero desde luego aparte de sentir un poderoso estímulo sexual al verle, la presencia de su persona me recuerda una interminable cadena de errores que lo que quiero es olvidar. Así que le aparto un poco de mi y digo

"te recuerdo que fuiste tu conmigo y  mi polla en un cacharrito de plástico al hospital. ya sabes lo que he pasado, y no te echo la culpa, ¿vale?, pero cuando estoy contigo me parece como que revivo toda esa pesadilla" le veo que él se queda un poco como sin saber qué decir y tengo que añadir "venga, echamos unos cuantos buenos polvos, pero no es como que estemos enamorados, ¿no?"

Creo que la cago cada vez que abro la boca porque MaridoPerfecto se vuelve de espaldas y apoya la frente contra los nudillos abatido. A la vez orienta en mi posición ese culo de exposición fotográfica ligeramente apretado dentro de los vaqueros viejos, y empiezo a olvidar lo que estoy diciendo. A través de un círculo de tela más desgastado de su trasero adivino la tela blanca de su calzoncillo e inmediatamente debajo la piel más oscura de su muslo.

Lo sé, todo es muy traumático y tal, pero siento que mi amiga de ahí abajo se me ha puesto dura como hacía meses, así que presiono mi entrepierna contra sus nalgas, rodeo su cintura con una de mis manos y le susurro al oido

"vamos dentro y hablamos, ¿eh?"

Él coloca su mano sobre la mía y la desliza hasta su entrepierna donde compruebo que él también está super empalmado

"bueno" dice sonriendo " como dicen en las novelas, primero follamos y luego discutimos la relación, ¿vale?"

...me revienta estar tan colgado de MaridoPerfecto pero lo cierto es que se me doblan las rodillas cuando entramos a empellones en mi piso mientras me mete la lengua en la boca llenándome de su sabor suavemente salado, impactamos contra la librería del pasillo haciendo caer media docena de libros y continuamos sobándonos, desnudándonos y empujándonos hacia el dormitorio en un estado que solo puedo definir como de embriaguez sexual absoluta.

Cuando está sentado en la cama en pelotas ante mi, con su pecho cubierto de un vello oscuro que se vuelve más denso según baja hacia su polla, los muslos separados y los ojos azules que casi son violáceos bajo la niebla del deseo, llaman a la puerta.

"No me jodas, no contestes" dice MaridoPerfecto agarrándose el rabo y ofreciéndomelo con un movimiento de cadera.

"No pienso contestar" digo arrodillándome entre sus piernas y él se apoya en los codos y rie bajito haciendo oscilar aquello ante mis ojos.

Vuelven a llamar la puerta con más insistencia y escucho una voz
"Soy yo, el comisario...sé que está en casa, vamos, tengo gente siguiéndolo" dice ComisarioPotente y miro a MaridoPerfecto que menea la cabeza negativamente a toda velocidad.

"¡No!...no puede verme aquí"

"Pero venga..." digo mientras repto sobre él acariciando esos pesados y oscuros huevos de infarto "él ya sabe que tu y yo teníamos algo que ver...si no le abro va a ser peor, ¿no lo entiendes?"
"No. Tú eres el que no lo entiendes."

Le veo que mira al techo, mira a un lado, luego al otro, sacude la cabeza y susurra
".....es que todos esos tipos eran una manada de cerdos, ¿o no?"

Me quedo como liebre olisqueando el aire, alerta del todo.

En la vida cuando las grandes revelaciones se pronuncian, casi nunca se escuchan campanas de fondo ni música celestial. Es más, a menudo hay que tener los oídos abiertos porque si no, no te enteras de que se han pronunciado.

ComisarioPotente vuelve a llamar, golpeando la puerta ahora con energía.
"¿Se encuentra bien?" grita.

Yo pego un brinco y trato de correr hacia la puerta pero MaridoPerfecto es más rápido que yo, me hace un perfecto placaje y caemos los dos al suelo abrazados, con su mano impidiéndome abrir la boca, en parte asustado y en parte un poco cachondo, ¿qué le voy a hacer?

Ahí fuera oigo a ComisarioPotente discutir en voz baja con un subalterno
"¿pero seguro que le has visto entrar al portal?"
"si señor, era él"
"¿y si salió por alguna salida de emergencia? ¿has pensado en eso?"
"joder, señor, si viene a su casa porqué iba a salir por la puerta de emergencia"
"para perderte la pista a ti, so canelo, ¿qué te parece eso?"

Ellos ya se alejan escaleras abajo y MaridoPerfecto continua echado sobre mi, con su polla erecta apretada contra la mía y la mano cerrándome la boca, los ojos azules clavados en los míos y la respiración acelerada.

"No voy a hacerte daño" dice en voz baja y me quita la mano de la cara.

Respiro hondo para controlar el aliento y digo por fin
"Lo hiciste tu"

Parece un poco enfadado, mira a un lado y al otro hasta que por fin apoya la cabeza en mi pecho y responde en voz baja
"Toda esa gente eran de lo peor...te trataron como a una mierda, y no sé, cuando todo se fue a tomar por el culo en mi matrimonio después de que la loca de mi mujer te hiciera aquello, pensé que tenía que resarcirte de alguna manera, ¿sabes?"

Reí como una gallina asustada mientras le acariciaba el cabello para tranquilizarle, porque una castración es lo máximo que un hombre adulto puede tolerar en una sola vida, o eso es lo que mi experiencia me da suponer, y no deseaba exponerme al riesgo de padecerla por segunda vez.
"...pero toda esa movida de las latas de comida para gato...¿no es un poco fuerte?" digo por no quedarme callado.
"¡No! Se trata de que piensen que es un desequilibrado mental, ¿entiendes?" ahora apoyado sobre las dos manos desliza su polla erecta contra mi entrepierna y yo,de modo casi inconsciente, me agarro las rodillas y separo los glúteos para dejarle mayor campo de aterrizaje.
"...es una puta locura...si te pillan te van a meter al talego de por vida...y me vas a dejar a mi fuera. ¿como vamos a solucionar eso?..."

Él sonríe un poco, luego se ensaliva la polla sin movernos y noto como empieza a apretar contra la entrada de mi culo.
"No nos van a pillar" dice y aumenta su presión un poco más logrando introducirse solo unos milímetros.

Suelto un breve gemido, él me besa y ahora sujetandome las rodillas contra los hombros, deja caer todo su peso sobre mi, entrando de un solo golpe.
Me duele de cojones, pero a la vez no quiero que se despegue ni un ápice de mi cuerpo. Le abrazo el culo con mis piernas y le aprieto contra mi, jadeando en su oreja

"Y qué se supone que vamos a hacer....¿vamos a irnos a una isla?"

Sus caderas cogen ritmo, me agarro fuerte a él y la realidad inmediata deja de tener importancia.

domingo, 3 de junio de 2012

MULIERES



Al día siguiente paso de puntillas por mi casa en un momento en que veo a Elvis marchándose a la playa y recojo mis cosas para instalarme con las rusas. La verdad es que lamento dejar mi apartamento con vistas al mar y a Elvis a cambio del oscuro piso de las chicas, pero la cuestión primera era escapar de mi pasado y una vez que ComisarioPotente me ha localizado, creo que todo lo demás está a un paso de venir detrás.
Tatiana ya comparte habitación con sus dos hermanas, así que me acomodan en una gran cama de matrimonio con otras dos rubias altísimas y espectaculares, Irina y Natasha, a las que me cuesta distinguir. Las dos ríen alborozadas cuando mi nueva amiga me levanta la falda y les enseña mis calzoncillos de corte clásico,así que imagino que todo queda arreglado entre nosotros y tengo un tiempo de relax mientras decido a donde voy, pero Irina cuchichea algo al oido de Natasha y luego pregunta a Tatiana
"...pero Tanya, que ocurrirá cuando venga Nikolay"
"No será mucho tiempo, ¿verdad?" dice mirándome dubitativa como si ese problema que parece ser tan evidente no se le hubiese ocurrido "Las visitas de Nikolay las solemos tener calculadas, pero a veces el quiere follar con una chica, tu me entiendes, y en cualqueir momento de la noche aparece, entonces..."de pronto repara en mi cara de interrogación y aclara como si estuviese hablando del tiempo "oh, él es el chulo, tu ya lo entiendes, ¿no?...no es muy listo" añade haciendo mondarse de la risa a Irina y Natasha "pero tiene amigos malos...es mejor que no te vea y si te ve, que no sepa que no eres una chica, ¿vale?"
En este momento de mi experiencia vital me parece que lo menos pertinente es introducirme en el oscuro mundo de las mafias rusas. De hecho, después de que en el escaso tiempo que llevo allí haya tenido que chuparle la polla a mi jefe gordo y que un alemán me haya metido el puño dentro del culo unas cuantas veces, me planteo si no será mejor volver antes de que venza la baja que mi amiga RecienCasada me apañó en el trabajo para recuperar mi casa, mi empleo y mis asuntos, dado que mi polla ha dado el visto bueno y se muestra recuperada totalmente de los acontecimientos que han puesto patas arriba nuestra vida. 
Que extraño es el destino, quien iba a pensar que la razón de que un tío tan asqueroso como JefeGordo se cruzase en mi camino era nada más que iba a poder reivindicarme como macho y como persona dándole por el culo. Los caminos retorcidos que siguen la vida de las personas están llenos de revueltas pero al final, cada una de ellas termina por tener su sentido.
Así que tranquilizo a Tatiana y la prometo que al día siguiente cogeré un tren y me volveré por donde vine para no causarlas problemas con su chulo. Todas me abrazan y lloran diciendo que no es necesario que me marche, que podremos encontrar una solución, pero desde el momento en que mi polla penetró el sucio recinto de JefeGordo fui consciente de que una fase quedaba concluida y era hora de volver a tomar las riendas de mi destino.
Este rollo "Brad-Pitt-bajando-del-Himalaya" se me corta cuando esa última noche en el piso aparece Nikolay y nadie se entera porque nos hemos bebido entre las ocho chicas y yo catorce cartones de vino tinto con cocacola. El considerable pedal que llevo encima hace que me quede KO con la peluca puesta, así que cuando el chulo da dos patadas a la cama lo primero que grita es, según me traduce la temblorosa Natasha, "quien es esta puta".
Luego al oir que me traduce al castellano, me mira mejor y se sonríe
"pero esto es un tío, ¿no?"
Nikolay está a la altura de tamaño de sus compatriotas rusas, mide por lo menos como Elvis y es igual de rubio que ellas, incluso podría estar bueno si no tuviese esa cara de mala hostia.
Me manosea el pecho con rudeza y chasquea la lengua
"menuda mierda pero si ni siquiera se ha puesto tetas...pero a ver, que me habeis metido aquí"
Tatiana acude en mi ayuda con cara de miedo, y eso me hace sospechar que el tío es de armas tomar porque ella no es de las chicas que se asustan facilmente.
"¡pero es una campeona chupadora de pollas, te lo juro!" le dice acariciándole el cuello y con la otra masajeándole el paquete "por eso te la he traido, ya verás, te va a hacer de oro, Kolia, te lo aseguro"
Luego con cara de no saber como voy a reaccionar yo le baja la bragueta, le saca la polla al aire y me anima temerosa
"venga, hazle una demostración.."
Nikolay se menea el rabo divertido y me hace gestos para que me acerque.
"a ver como la chupas...pero no te quites la peluca, no me gustan los maricones, vale"
Tengo un momento para plantearme porqué ocho chicas robustas como estas no se lian la manta a la cabeza, agarran a este capullo, le atan de pies y manos y le tiran al mar, pero...
...en fin, la polla de Nikolay está tremenda, sonrosada y brillante, no sé, es todo un postre después de semanas de ponerme de rodillas delante de JefeGordo. No me cuesta demasiado acuclillarme ante él, acariciarle unos huevos cubiertos de pelusilla rubia para luego meterme aquello en la boca.
De nuevo mi teoría acerca de las habilidades de un tío chupándole el rabo a otro se de muestran porque Nikolay comienza a emitir unos sonoros jadeos y a decir cosas en ruso que no entiendo pero que hacen reirse a las chicas. Me siento controlando la situación, al mando de las cosas así que me decido a hacer que el mundo ruso conozca donde se encuentra el punto G masculino: la misma mano que está acariciando esos rubios testículos comienza a ir y venir adelante y atrás con delicadeza, hasta que antes de que él se de cuenta la punta de mi dedo índice está dibujando círculos y presionando con delicadeza en torno al ano de Nikolay. Me supongo que su punto de vista sobre los maricones tiene que cambiar un poco por que los muslos le empiezan a temblar y los gemidos se hacen cada vez más finos. Noto que Nikolay flexiona los muslos y se separa las nalgas con las manos para facilitar mis avances así que directamente me chupo el mismo dedo, se lo meto y comienzo a masturbarle con parte de su polla en mi boca, hasta que termina corriéndose aparatosamente, para luego caer como un bulto desmadejado sobre la cama que hace no mucho compartíamos Irina, Natasha y yo.
Todas cuchichean y rien bajito mientras nos vamos a la cocina, allí Tatiana me dice al oido
"las chicas se creen ahora que Nikolay es marica, y no sé si él también va a creerlo...es bueno para todas, ahora un poco menos de miedo, ¿sabes?" luego deja de sonreir y me apremia "recoge todo y vete ya, porque si él termina por saber quien eres no vas a salir nunca de esto, ¿me entiendes'"
Veo su mirada de pronto más sombría y me doy cuenta  de que ahí detrás hay mucho más de lo que yo estoy viendo. Me limito a entrar de puntillas al dormitorio, coger la pequeña bolsa que constituye mi equipaje y me visto ahora con unos vaqueros, una camiseta y sin la peluca.
Cuando entro a la cocina a despedirme de todas, cacarean y lloran desconsoladas.
"¡el muy guapo!" protesta Irina "¿porque no matamos a Nikolay y él queda con nosotras?"
Mi destino no está al frente de una casa de prostitución de chicas rusas, y tampoco entra en él decirlas a ellas qué es lo siguiente que deberían hacer con sus vidas después de irme yo de allí.
Las beso en las mejillas una por una y luego le digo a Tatiana
"si Nikolay se pasa, tiradle al mar entre todas y buscaros la vida por vuestra cuenta, ¿vale?"
Tatiana pretende darme los 200 euros que le cobró a JefeGordo para ayudarme en mi viaje de vuelta y el maldito gesto me hace estar llorando un cuarto de hora en el rellano de la escalera mientras ella me palmotea la espalda comprensiva.
"Vamos, tu hiciste todo el trabajo allí ha-ha-ha, es justo que te lleves el dinero, ¿eh mi ninio?"

...cuando llego a la estación de tren dispuesto a coger el primero que me devuelva a casa, envuelto en el perfume y el afecto de las chicas, el mensaje interior es:

"hay esperanza"